“Me duele el talón porque tengo un espolón Calcáneo”. ¿Es el espolón el motivo real de su dolor?
Habitualmente llegáis a consulta diciendo que tenéis un espolón y por eso os duele el talón. Algunos observáis como una punta en la RX y os da la sensación de que esa parte del hueso se clava en el interior de vuestro pie. También os han recomendado terapias como ondas de choque u otras técnicas para romper ese trozo de hueso. Con este post queremos aclarar que es el espolón calcáneo, porque aparece, y que es lo que produce ese dolor.
¿Qué es el espolón calcáneo?
El espolón calcáneo es una protuberancia osteofítica de más de 2 mm que se encuentra por delante de la tuberosidad del calcáneo. Puede ser de dos tipos: espolón calcáneo plantar y espolón calcáneo dorsal.
¿Por qué aparece?
Se produce principalmente cuando la fascia plantar, que es un tejido elástico que une el talón con la zona que va por debajo de los dedos del pie, está sometida a una excesiva tracción y sobrecarga, generando micro roturas. Esta inflamación propia de la fascia de manera constante produce que las partículas de calcio (osteofitos) vayan formándose en esa región formando así el espolón.
¿Qué es lo que produce ese dolor?
Cuando hacemos una radiografía de perfil se observa es espolón con forma puntiaguda, pero si lo observáramos de frente sería más cuadrado o redondeado. Por lo tanto, su dolor no es a causa de que se clave el pico. A demás el espolón no se forma de un día para el otro, puede ser que usted lleva 4 años con un espolón y no le haya producido en ningún momento dolor. En consecuencia, lo que está produciendo ese dolor no es el espolón, sino la inflamación de la fascia plantar, que normalmente va a ser a consecuencia de una alteración biomecánica de su pie.
¿Cómo trato el espolón?
En muchas ocasiones se proponen terapias con el objetivo de descalcificar esa zona como son las ondas de choque u otras alternativas. Esto puede ser útil para aliviar el dolor o la sintomatología, pero no estamos resolviendo el origen real de su problema que es la inflamación de la fascia que viene a consecuencia de un problema biomecánico. Por lo tanto, lo que debería hacer es acudir al podólogo para realizar un estudio de la pisada y observar esa alteración si es a consecuencia de una mala pisada. En caso de que tenga una alteración de la marcha, lo más probable que necesite plantillas personalizadas.
